Después de que la Reserva Federal (Fed) redujera su tasa de interés de referencia por primera vez en cuatro años, el índice del dólar continuó cayendo. El rendimiento del bono del Tesoro de EE.UU. a 10 años bajó al 3,63% tras la decisión. Esta reacción del mercado aceleró el impulso de los precios del oro hacia el nivel de 2600. Además, la Fed indicó la posibilidad de otro recorte de 50 puntos base en la tasa este año. El presidente de la Fed, Jerome Powell, señaló que los riesgos al alza para la inflación han disminuido, mientras que los riesgos a la baja para el empleo han aumentado.

Desde una perspectiva técnica, si los precios se mantienen consistentemente por encima del nivel de 2580, podría ocurrir un aumento a 2600 y luego a 2650. En el lado negativo, si el precio cae por debajo del nivel de soporte de 2570, una corrección podría extenderse a 2535 y luego a 2482.






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