De cara al futuro, las posibles políticas comerciales de la nueva administración Trump, incluidos los aranceles a las importaciones europeas y chinas, podrían impulsar la inflación en Estados Unidos. Mientras tanto, si la Reserva Federal se inclina hacia un enfoque más cauteloso o agresivo, reduciendo las subidas de tipos, podría proporcionar apoyo adicional al dólar estadounidense.
Sin embargo, como sabemos, el precio nunca baja el linea recta y necesita sus " respiros " para seguir bajando. En temporalidad menor podríamos ver un rango en forma de plana para luego seguir el camino.